Hacía más de cinco años que no pasaba por allí y es que fue antes de que fuera premiado por las Guías. Desde entonces pensabamos un día y otro pasar por allí, pero por cosas de la vida ya íbamos tarde.

El Templo "El Vagabundo Millonario", pasó en el 2023 de Alcalá de Guadaira a Sevilla Este, debido que a las horas que se merecía , de vuelta el camino se me hacía inteminable de madrugada y eso que está a 12 minutos de mi casa en coche. Una buena noche y con muchas horas en el cuerpo decidí irme a Sevilla Este. Como decía la canción del grupo roquero "Obús"...Casi me mato beby...Pero dos años después ya estoy en pleno despegue.

Un domingo de esos que uso para arreglar el templo, se me presenta mi buen amigo Eduardo Orpez. Estaba buscando un local para sus negocios y le enseñé el templo. Le flipó. Me dijo que traería a un amigo que va buscanndo restaurantes y sitios nuevos e hizo famoso el "12 Tapas". Aunque no lo creí del todo, ya que para mí la fama es el boca a boca, como lo conocí yo ( al 12 Tapas), descubrí días más tardese refería a otra cosa: el Quillo de Cádiz y la mención Gourmand de Michelín...

Y en estos días que Xodó y yo ándabamos con negocios por esa zona, decidimos ir allí. El espacio un poco más moderno que el que conocíamos era más agradable aún, y es que ya han pasado años.


Nos sentamos y nos atendió un joven muy agradable y silencioso. 

Para empezar la "Ostra con Gazpacho de Mandarina" , pedazo de Tierra-Mar que a Xodó le flipló.


Continuamos con "Chipirón en salsa de Caracoles". Nos recordó a un plato que probamos allí y nunca se nos fue de la cabeza: "Mejillones con salsa de Cabrillas", y el joven que nos atendía nos comentó que de vez en cuando lo ponían.


"Menudo de Vieiras" fue un plato que nos volvió locos , ya que otro Tierra-Mar con sabor y algo distinto que lo visto por ahí.


Yo me quedé bien pero Xodó que al medidodía se come las rocas, pidió un cuarto plato. La "Ensaladilla del Puchereo y sus Habíos" buena como todo lo que probamos, pero por experiencia, le dije a Xodó que si la calentara para subir sus aromas lo petaría. Y ella me comentó que nadie es tan atrevido como "El Vagabundo" para poner una ensaladilla templada...




No pedimos postres ya que yo estaba lleno, pero pensamos en volver sin duda, por el precio, por los sabores y por el conjunto en general. Una experiencia que merece muchísimo la pena visitar. Volveremos con más frecuencia sin duda. Gracias de nuevo.