No hay mes que pase que no vaya con Xodó, siempre, a degustar mi maravillosa y cercana comida peruana. Pero no la mezcla con la Japo, la nikkei, sino la peruana pura. Y no es que no me guste la japo, la adoro y me encanta ir a japos, pero o una o la otra. La fusión de ambas no me gusta. Para comer. Para cocinar es otra cosa...

Normalmente vamos a nuestro preferido, a Lima, cerca de calle Greco con Daniel el chef, que por cierto , no es casualidad que lo mencionen en la Guía Repsol. Son muy buenos, mucho.

Pero hoy voy a hablar de la cocina peruana de Sevilla Este: La Salá.


Aunque su jefe no estaba , nos dijo una señorita muy atenta,le preguntamos si lo habían reformado desde la última vez que fuimos y nos dijo que sí.

Nos tomó nota de las bebidas y las puso las bebidas con el aperitivo,  el maíz frito "La Cancha". Yo le digo el mono, porque cuando empiezo a comer entro en éxtasis y no paro...Qué gustazo...Yo le digo el mono, porque es lo que parezco cuando lo tomo, es un parar de maravilloso crujiente, frito y salado...


Una vez que se acaba el cuenco ya está preparada mi Inca-Cola fresquita...Qué maravilla esos dos sabores en la boca...


Está claro los platos obligatorios en la cocina peruana para nosotros. Primero el anticucho de corazón de vaca. Que sublime el aliñado que le dan a esa carne tan basta que se hace un manjar al macerarlo. Se me hace la boca agua sólo de pensar en él cuando escribo estas líneas. Y la patata con doble cocción que tan sólo ellos le dan ese punto. Puro espectáculo...


De segundo está claro y obligado: el ceviche. Normalmente le decimos que nos ponga el mejor que tenga. Nos puso el mixto...Una brutalidad. Aunque Xodó siemrep pregunta de que pescado es ,siempre afirma cuando le dicen la raza, que es pesacado del Mekong...Xodó y su linda alegría...


Para terminar pedimos un solomillo a la brasa con guarnición de arroz (la que suelen poner ellos) y una salsa amarilla, Huancaína, que me pareció una exquisitez.


Y por supuesto no pudo faltar Pisco Souer en este casa de mango para rematar tan maravillosa jornada.

Gracias La Salá, seguirimos volviendo, está muy cerca de casa y nos facilitáis eso de cenar en peruano cerca de casa...

P.D: No os asombréis que siempre cuente las cosas buenas de donde voy, ya que para las malas están los foddies, los intagramers , los ticktokers y la madre que los parió...