"Los maravillosos impuestos".

Cuando alguien querido (pocos) me propone algo, lo pongo en marcha. Se que me lo dice porque soy un hacedor de cuchillo en boca y separar malezas. 

El otro día uno de mis mejores amigos (aunque familiar , la sangre nunca es dulce) me planteaba de irse a Dubai. Yo le dije por qué no. Le planteé un mes allí (a mi no me falta trabajo en cualquier parte del mundo , soy chef y escritor , está claro). Yo me encargaría de la parte burocratica. Pediría un mes de excedencia en mi proyecto Restaurante EVM, y al lío.

Este ser queriodo quería buscar nuevas fuentes de ingresos, ya que aunque ganaba dinero pagaba más impuestos. Y le conté una pequeña historia.

"Querido, los impuestos son maravillosos. 

Pero en un país donde sepan de qué se tratan. Normalmente el gobernante de un país no sabe de qué se tratan. Son gentes que no generan dinero con su sudor y lo malgastan. 

No hacía mucho tiempo un comisario de la policía, paraba en un negocio, donde yo paraba e hicimos muy buena amistad. 

Reconocíamos que seríamos amigos porque ambos llevábamos un libro en la mano cuando nos veíamos (es casi verídico). Entre muchas charlas de ambos, un día me contó que cuando era joven gobernaba el enano. Lo llamo así aunque él lo admiraba, yo no tanto. Esos enanos de aquellas épocas no eran dignos de admirar.Pero abierto a escuhar me contó una linda historia. El enano en concreto de nuestra nación, creaba empresas. De esas empresas sacaba rendimientos y de esos rendimientos se pagaban las cosas con las que hoy en día se pagan impuestos.

Hacía hogares que se pagaban facilmente con constructoras propias, generaba dinero con la telefonía, televisión, electricas, y los bancos. Y pagaba con ello cosas con lo que se paga con los impuestos. Había hueco para uno que otro pazo que cupaba una ciudad y provincia entera...

Piensa por un momento por qué te quieres ir a Dubai le dije. Estaba claro , porque allí no se paga impuestos. Porque el gobierno tiene dinero de sus empresas (o del petróleo) y lo paga de sus bolsillos. Y claro está eso genera más riqueza, ya que atrae a muchos empresarios. A esos empresarios no les importa en cualquier caso pagar algo de impuestos.

El se quedó un poco flipado.

Imagínate que Cantinflas (por el parecido al genial humorista) en vez de crear tanto ministerio y tantas pagas (creando un nuevo funcionariado sin oposición como lo denomina el genial Mario Conde para ganar votos y residencia futura como hicieron otros en sudamérica) empezara a montar empresas. 

Cada vez habría menos deuda y menos impuestos. 

Pero Cantinflas y sus colegas no saben cómo y para qué sirven los impuestos. No los invierten. Se los gastan. No le dan valor al dinero que otros los han creado con el sudor de su frente.Y es que las criaturas no saben de eso. Son políticos y no empresarios. Que le dejen los impuestos en manos de José Elías, y ya veríamos.

Enfin querido, le decía a mi amigo, por eso realmente te quieres ir a Dubai. Normal..."