Escondido entre un maremagnun de obras entre Sevilla Este y la avenida de Montesierra, obras que postergarán el tan ansiado metro, se encuentra uno de los templos de la Cocina Marroquí.

He de decir  que en mis más de 30 años en La Restauración , tengo claro que para mí las tres cocinas más importantes que hay son : La Japo, la China (la de verdad, la autóctona, la que se come en Londres y allí) y por supuesto la Marroquí.

Recuerdo cuando salí de la Escuela de Hostelería lo primero que hice fue trabajar en restaurantes de todas las cocinas del mundo. Por supuesto una de ellas fue la marroquí y allí descubrí que fue la madre de la española y la que mejor especia del Mundo. Es tan grande la importancia que tiene la comida marroquí en todas las cocinas a nivel mundial que incluso Heston Blumenthal hace platos con el Cous-cous. O aqui en España, el tan laureado (con fundamento) el gran Paco Morales. Que se lo digan al cordobés la importancia que tiene...

Dicho templo de la cocina marroquí la descubrí ya hace tiempo. Como últimanete he vuelto a las tan ansiadas infusiones, me acordé de ellos y fui a hacerle una visita. Se merecen este homenaje por mi parte.

Xodó se acordaba de un pan de desayuno con miel. En este caso el simpático camarero le propuso ponérselo con queso...El Rghaif...Brutal...



Yo por supuesto participé con el exquisito manjar; pero quería dejarle espacio, como se merece, a la pastelería marroquí sin par...


 Ya con mi estómago lleno, me di una vuelta por sus instalaciones y les hice fotos a sus vitrinas. Carnes y comidas halal, embutidos, especias...




Le pedí que me explicaran cómo se reservaba y me dijeron que si éramos dos, pues siempre había espacio para nosotros, y los horarios. Estamos expectantes de ir a degustar las Tajines y sobre todo la Pastela. Os dejo la carta por si os sirve de algo vagabundistas.